Dolores de espalda que aparecen por falta de ejercicio

El dolor de espalda es un problema de salud recurrente. La Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria señalan que, el 80% de personas han sufrido o sufren de dolores de espalda en algún momento de su vida. Pero para que duela menos, habría que ejercitarse con asiduidad y mantener una buena forma física.

Dolores de espalda

Los grupos musculares que se relacionan con la espalda son como las cuerdas que sujetan el mástil de un barco. Así que cada vez que se da un paso, los músculos ajustan la tensión para evitar una caída. Todos los grupos musculares se coordinan entre ellos para evitar sobrecargas. Pero si el tono muscular de los diferentes grupos musculares está desequilibrado, funciona mal o es insuficiente, hay una contractura y aparecen dolores de espalda.

El 90% de los casos de dolores de espalda tienen un buen pronóstico. Casi siempre se debe por contracturas, sobrecargas, hernia discal o déficit muscular. Asimismo, estos dolores suelen hacer patentes cuando el músculo se encuentra en acción. El dolor de espalda más frecuente es aquel que se produce en la zona lumbar también conocido como lumbalgia. El motivo es que la base de la columna vertebral soporta más peso que el resto.

Tras ella se encuentran los dolores cervicales, los cuales representan el 30%. Esta parte de la espalda por lo regular duele al igual que la lumbar, siendo una zona más móvil que la dorsal. La dorsalgia es el dolor que se produce en la zona intermedia de la espalda y supone un 10% de los casos de dolor.

Es por ello que estudios científicos demuestran que cuando una persona hace ejercicio de manera habitual, ayuda a minimizar el riesgo de sufrir dolores de espalda y, si llegase a aparecer un episodio de dolor, quizás duela menos y dure poco tiempo con la probabilidad de que casi no se repita.

En el caso de personas sedentarias, el 80% de los dolores de espalda se supera en menos de 15 días. Pero si se rebasa, incrementan las posibilidades de que el episodio de dolor sea mayor (hasta 90 días) y se convierta en crónico. Por este motivo, se deberá ejercitar una vez que ha superado el primer episodio de dolor. Pero si se mantiene sedentario, el riesgo es mucho mayor y se puede repetir, alargar el tiempo y la intensidad.

En conclusión, es importante mantener una actividad física constante en la medida de lo posible para evitar el dolor de espalda. El Pilates, la natación o el gimnasio son deportes que hacen más fácil desarrollar simetría en los grupos musculares de la espalda.

Imagen: revistagq

Fortalecimiento

La mente y el cuerpo van de la mano. Al realizar terapias de fortalecimiento tu vida cambiara completamente; te sentirás con mucha más energía y serás más fuerte. En Fisioyak trabajamos con muchisimos atletas de alto rendimiento que requieren dar su maximo desempeño en sus disciplinas, por ello, recurren a nosotros para trabajar el fortalecimiento físico.

× ¡Agenda tu Cita Hoy!