(CNN) — En una decisión audaz, la Federación Mundial de la Salud publicó este jueves un resumen de política pública que señala que ninguna cantidad de alcohol beneficia al corazón.
“En la Federación Mundial del Corazón decidimos que es imperativo que hablemos sobre el alcohol y los daños a la salud, así como los daños sociales y económicos, porque hay una sensación en la población en general, e incluso entre profesionales de la salud, que es bueno para el corazón”, dijo Beatriz Champagne, presidenta del comité que elaboró el informe.
“No lo es. Y la evidencia ha demostrado cada vez más que no existe un nivel de consumo de alcohol que sea seguro para la salud”, insistió Champagne, quien también es la directora ejecutiva de la Coalición para la Salud de América, una organización dedicada a mejorar la salud en el continente.
Las críticas no tardaron en llegar
Los críticos se apresuraron a cuestionar la postura de la federación. En ese sentido, señalaron que ignoraba los estudios que muestran un pequeño beneficio para algunas enfermedades cardíacas cuando se consume una cantidad moderada de alcohol.
Uno de esos estudios sobre los riesgos del alcohol, que publicó The Lancet en 2018, se usó ampliamente en el resumen de la Federación Mundial del Corazón (WHF, por sus siglas en en inglés). “Pero, tergiversa seriamente sus hallazgos e informa de manera selectiva”, dijo David Spiegelhalter, profesor de Winton para la Comprensión Pública de Riesgos en la Universidad de Cambridge.
publicidad
“Dado que el informe de la WHF hace referencia a este documento, es realmente extraño que su conclusión sea que ‘ninguna cantidad de alcohol es buena para el corazón'”, señaló por su parte Emmanuela Gakidou, profesora del Instituto de Métricas y Evaluación de la Salud de la Universidad de Washington. Gakidou analiza los riesgos del alcohol con base en la Estimación de la Carga Global de Enfermedades, que recopila datos mundiales sobre muerte prematura y discapacidad en más de 300 enfermedades.
“Hay algunos estudios científicos que respaldan su titular. Pero, según mi trabajo en Estimación de la Carga Global de Enfermedades, que reúne toda la evidencia disponible hasta la fecha, la afirmación de la WHF no tiene el respaldo de la evidencia científica actualmente disponible”, explicó Gakidou.
Federación responde a críticas insistiendo en riesgos del consumo del alcohol
En respuesta a estas críticas, Champagne envió a CNN el siguiente comentario:
“Si bien nos mantenemos en nuestros mensajes clave, es útil saber que la redacción de algunas partes del resumen de políticas puede dar lugar a malentendidos. Para abordar esto, hemos actualizado el documento (específicamente la página 8) para articular más claramente nuestras conclusiones. Y, específicamente, citar los estudios a través de los cuales se llegaron a ellas”, dijo Champagne en un correo electrónico.
“En resumen, nuestra posición es que los estudios que muestran un efecto cardioprotector significativo del consumo de alcohol han sido, en general, observacionales, inconsistentes, financiados por la industria del alcohol y/o no sujetos a control aleatorio. Además, cualquier efecto cardioprotector potencial es anulado por los riesgos y daños bien documentados. Lo que hace que nuestro juicio sea que ninguna cantidad de consumo puede considerarse buena para la salud del corazón”, completó.
La Asociación Estadounidense del Corazón (AHA, por sus siglas en inglés), que es miembro de la federación, dice que “la moderación es clave” cuando se trata de alcohol. Y esta se define como no más de un trago al día para las mujeres y dos para los hombres.
La Dra. Mariell Jessup, directora científica y funcionaria médica de la AHA, le dijo a CNN en un correo electrónico que la organización “revisará cuidadosamente” el informe de la WHF. Dijo que la AHA había evaluado recientemente la evidencia sobre el alcohol y el riesgo cardiovascular para su Declaración Científica de Orientación Dietética de 2021, y “concluimos que si uno no bebe alcohol, no debe comenzar; y si bebes alcohol, debes limitar la ingesta”.
Una visión mundial
La Federación Mundial de la Salud es una organización de defensa de la salud con sede en Ginebra, que representa a cientos de asociaciones del corazón en todo el mundo. Lanzó su resumen de políticas públicas, “El impacto del consumo de alcohol en la salud cardiovascular: mitos y medidas”, para contrarrestar los informes de que algo de alcohol está bien o incluso es bueno para la salud del corazón.
Beber alcohol aumenta el riesgo de varios problemas cardiovasculares, como la enfermedad coronaria, insuficiencia cardiaca, hipertensión, accidente cerebrovascular y aneurisma aórtico, según el informe. Cualquier cantidad de alcohol, no solo su consumo excesivo, puede conducir a la pérdida de una vida saludable, dice.
“Durante las últimas décadas, la prevalencia de la enfermedad cardiovascular casi se ha duplicado. Y el alcohol ha desempeñado un papel importante en la incidencia de gran parte de eso”, dice el informe.
La enfermedad cardiovascular es una de las principales causas de muerte en el mundo. De hecho, afecta de manera desproporcionada a las personas de nivel socioeconómico bajo. En 2019, casi 2,4 millones de muertes, no solo relacionadas con el corazón, podrían atribuirse al alcohol, según el informe. El alcohol también afecta negativamente la salud mental.
El pedido dela OMS sobre el alcohol
La Organización Mundial de la Salud ha pedido una reducción relativa del 10% en el consumo de alcohol per cápita entre 2013 y 2030. Pero, el informe dice que la falta de inversión en estrategias comprobadas para la reducción de alcohol, además de la información errónea de la industria, ha obstaculizado el progreso hacia ese objetivo.
“La representación del alcohol como algo necesario para una vida social activa ha desviado la atención de los daños del consumo de alcohol. Al igual que las afirmaciones frecuentes y ampliamente difundidas de que beber con moderación, como una copa de vino tinto al día, puede ofrecer protección contra las enfermedades cardiovasculares”, dijo Monika Arora, miembro del Comité de Defensa de la WHF y coautora del informe, en un comunicado de prensa. “Estas afirmaciones están, en el mejor de los casos, mal informadas y, en el peor de los casos, son un intento de la industria del alcohol por engañar al público sobre el peligro de su producto”.
