La migraña es un tipo específico de cefalea que afecta a entre un 10 y un 15% de la población en todo el mundo. Se trata de un dolor que puede llegar a ser muy intenso y, a veces, incapacitante.
Aunque hay casos que necesitan ciertas medicaciones concretas para lograr aliviar esta molestia, existe una serie de estrategias que se pueden probar y que en ocasiones proporcionan una cierta mejoría a las personas afectadas. Estos son algunos de esos trucos.
1. Retirarse a un entorno tranquilo
A menudo, el dolor de las migrañas es fotosensible, lo que significa que responde a la intensidad de la luz. De la misma forma, puede verse amplificado por otros estímulos (sonido, olfato…). Así, retirarse a un lugar oscuro y silencioso, en el que minimicemos estos estímulos, puede ser de gran ayuda.
En la medida de lo posible se recomienda tratar de reposar, ya que también la actividad (incluyendo la intelectual) tiende a causar fatiga y agravar el dolor. Por otra parte, terapias de temperatura como los baños calientes o tibios ayudan a algunas personas.
2. Cuidar el sueño
Un descanso inadecuado puede ser el desencadenante de las migrañas, por lo que cuidar de la calidad del sueño puede evitar algunos episodios. Para ello, lo ideal es seguir algunas rutinas relacionadas con la llamada higiene del sueño, como establecer horarios regulares, dedicar un rato a relajarse al final del día y evitar la cafeína antes de irse a dormir.
3. Vigila la alimentación
Tanto el ayuno como ciertos alimentos pueden ser también el inicio de un episodio de migraña, con lo que los médicos aconsejan atender a este aspecto para evitar o el ingrediente en cuestión o pasar demasiadas horas sin comer, según el caso.
4. Haz deporte
Existe abundante evidencia que señala que el deporte tiene algunos efectos analgésicos, con lo que su práctica regular puede lograr que el dolor sea menos intenso. De la misma manera, el deporte tiene efectos beneficiosos sobre ciertos trastornos psicológicos, que también pueden empeorar la condición.
5. Evitar el estrés
El estrés en uno de los desencadenantes más claros de las migrañas, por lo que en lo posible mantenerlo bajo control puede mejorar la situación de las personas con la condición. Para ello, se recomienda mantener una rutina de descanso, una cierta organización del tiempo, intentar no desarrollar demasiadas actividades y dedicar tiempo al ocio de manera regular.
6. Usar analgésicos
Con todo, para muchas personas la aparición de episodios puede resultar inevitable. Cuando ello sucede, la única vía terapéutica es el uso de fármacos, ya sean analgésicos (inespecíficos y en algunos casos sin necesidad de receta médica) o más recientemente medicamentos desarrollados específicamente para la migraña (bajo prescripción médica).
