Aún estamos identificando muchas de las secuelas que puede causar la infección por SARS-CoV-2, como parte del síndrome complejo que conocemos como covid larga. Ahora, un nuevo estudio ha encontrado que una de estas secuelas podría ser el daño nervioso.
Daño en el sistema nervioso periférico
Tal y como expone un artículo en el medio especializado Neurology, algunos pacientes con covid larga sufren de una forma de daño nervioso persistente que a su vez puede conducir a fatiga, cambios sensoriales y dolor en las manos y en los pies.
Este daño nervioso, que ha sido observado en casos de coronavirus de poca gravedad, no parece causado por la infección en sí misma, sino más bien por la reacción inmunitaria (y, concretamente, inflamatoria) que desencadena en el organismo.
Concretamente, este daño nervioso afecta al sistema nervioso periférico y es específicamente prominente en las células de fibra pequeña.
Además, explican que parece ser una complicación bastante prevalente: de entre los participantes en el estudio (que, por otra parte, tiene la limitación de basarse en una cohorte de pacientes bastante pequeña), un 59% padecía neuropatía compatible con la covid-19.
En general, el hallazgo es consistente con otros tipos de daño nervioso observados en pacientes de covid, en los que parece que la complicación no está causada tanto por el ataque del virus en sí sino más bien por una respuesta inmune excesivamente agresiva.
Un daño difícil de tratar
Uno de los problemas que plantea este descubrimento es que se trata de un tipo de daño bastante complicado de tratar. Así, de los pacientes identificados en el trabajo, que fueron tratados con tratamientos inmunoterapéuticos (como inmunoglobulinas o corticoesteroides) sólo un 52% experimentó una mejoría, sin que ninguno lograse la completa remisión de los síntomas.
Por ello, recomiendan a las personas que experimenten síntomas neurológicos derivados de la covid (o al menos, que hayan aparecido tras esta y no tengan otra causa identificable) que consulten con un especialista, ya que es esencial identificar el tipo concreto de neuropatía para poder establecer una vía terapéutica con visos de éxito.