Si estás buscando perder peso, es posible que en algún momento te hayas preguntado: “¿Es posible acelerar el metabolismo?”. Los expertos de Harvard creen que la tasa metabólica basal depende de varios factores, como la edad y la genética. Esta es una de las razones por las que algunos cuerpos tienen naturalmente un “metabolismo rápido”, que quema más calorías en reposo, mientras que otras personas tienen un “metabolismo más lento”, en el que se queman menos calorías en reposo.
Sin embargo, tu cuerpo no siempre se encuentra en este estado, por lo que también necesita energía cuando realiza actividades, como hacer ejercicio. Según los estadounidenses Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, tu gasto calórico diario proviene de todas las actividades que realizas en un día, además de tu tasa metabólica basal.
Y la pregunta es: ¿es posible conseguir un metabolismo más rápido? Según los científicos, existen formas de aumentarlo o quemar más energía.
Dieta rica en fibra y proteínas
Los beneficios de los alimentos fibrosos, como las hortalizas de raíz y las fuentes de proteínas como los huevos, se conocen desde hace mucho tiempo. Comer una buena cantidad de ellos también podría acelerar el metabolismo, explica a Live Science la dietista certificada Theresa Gentile, portavoz de la estadounidense Academia de Nutrición y Dietética
“La fibra y las proteínas pueden aumentar ligeramente el metabolismo, ya que aumentan la necesidad de energía del cuerpo para digerir estos nutrientes”, afirma Gentile. “Las proteínas, en particular, pueden inducir una mayor tasa de termogénesis inducida por la dieta”.
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La ciencia está de acuerdo. En un ensayo clínico que analizó el efecto de las dietas reducidas en grasas sobre el gasto energético, los resultados mostraron que los participantes cuyas dietas consistían en un 29% de sus calorías en forma de proteínas tenían tasas metabólicas en reposo más altas que aquellos que consumían un 11% de sus calorías en forma de proteínas.
“Una dieta rica en proteínas también se ha asociado con un aumento del gasto energético en 24 horas”, añade Gentile.
Beber más agua
Es posible que beber agua tenga un efecto sobre el metabolismo. Un estudio, publicado en el Journal of Clinical Endocrinology and Metabolism, descubrió que beber dos litros de agua al día podría aumentar el gasto energético. Y otro, publicado en el International Journal of Obesity, mostró un aumento del 25% en el gasto energético en reposo en niños que bebieron agua antes de acostarse.
“Algunos estudios han demostrado un aumento del gasto energético en reposo (GER) de hasta un 25 a 30 % durante hasta 40 minutos después de la ingestión”, comenta Gentile. “Se sugiere que el agua puede aumentar el GER al activar el sistema nervioso simpático, actuando como un supresor natural del apetito y previniendo la deshidratación, que ralentiza la digestión y el gasto de energía”.
Comida picante
¿Te gusta la comida picante? Un estudio publicado en BMC Obesity descubrió que agregar capsaicinoides (que se encuentran en los chiles picantes) a su dieta puede aumentar levemente su tasa metabólica.
Mientras que un segundo estudio en Chemical Sense descubrió que “tanto la capsaicina como el capsiato aumentan el gasto de energía y mejoran la oxidación de grasas, especialmente en dosis altas”.
Sin embargo, Gentile duda de la eficacia de esta vía: “Los resultados son nominales y la cantidad presente en los chiles reales no es suficiente para producir un efecto”.
Entrenamiento HIIT
No es solo a través de ciertos tipos de alimentos que podemos acelerar nuestro metabolismo. Hay evidencia que sugiere que un entrenamiento HIIT también puede darle un impulso rápido a tu metabolismo.
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Un estudio descubrió que un entrenamiento HIIT de 30 minutos podría aumentar su metabolismo después del ejercicio más que cualquier otra forma de ejercicio, incluida una carrera en intervalos de alta intensidad o un entrenamiento de resistencia.
Té verde energético
Según las investigaciones, el extracto de catequina del té verde puede aumentar el gasto energético y el metabolismo de las grasas en reposo y durante el ejercicio. Sin embargo, la literatura no es concluyente.
Y como señala Gentile: “La cantidad, sin embargo, es nominal y las cantidades utilizadas en los estudios no se pueden lograr bebiendo té verde solo. La cafeína presente en el café, el té y el té verde puede aumentar el metabolismo en una cantidad moderada, pero probablemente insignificante para la persona promedio que consume estas bebidas a lo largo del día”.
Si estás buscando perder peso, es posible que en algún momento te hayas preguntado: “¿Es posible acelerar el metabolismo?”. Los expertos de Harvard creen que la tasa metabólica basal depende de varios factores, como la edad y la genética. Esta es una de las razones por las que algunos cuerpos tienen naturalmente un “metabolismo rápido”, que quema más calorías en reposo, mientras que otras personas tienen un “metabolismo más lento”, en el que se queman menos calorías en reposo.