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Las dietas ‘detox’ y los famosos zumos depurativos siguen ganando popularidad, pero según la doctora Federica Amatik, nutricionista, “realmente no hay evidencia” sobre los beneficios prometidos. Sobre estas prácticas también advierten otros expertos. Desde el portal de salud de la Universidad de Harvard también señalan que no hay suficientes estudios que demuestren que las limpiezas a base de zumos logren desintoxicar el cuerpo.
De hecho, el organismo humano ya cuenta con sistemas naturales, como el hígado y los riñones, que eliminan las toxinas sin necesidad de dietas extremas. A menudo se promocionan como métodos eficaces para “reiniciar” los hábitos alimentarios, pero su prolongado uso puede tener efectos negativos. La irritabilidad, el cansancio y las deficiencias nutricionales son algunos de los riesgos asociados a estas prácticas cuando se realizan de forma excesiva.
En una reciente publicación en su cuenta de Instagram, la nutricionista Federica Amatik advirtió sobre tomar estos zumos o bebidas ‘detox’ tan populares en redes: “No hay evidencia que apoye que consumir solo jugos de frutas en lugar de alimentos completos vaya a mejorar la salud a corto o largo plazo”.
La especialista destacó que este tipo de bebidas eliminan una de las fuentes más importantes de fibra, un nutriente esencial del que el 95% de la población no consume suficiente cantidad.
El mensaje de la doctora es claro: “Si quieres volver a tener hábitos alimenticios saludables o si buscas una forma de dar un descanso a tu intestino, es mejor que prepares alimentos nutritivos como sopas y caldos que te ayuden a dar un descanso a tu intestino, pero que te aporten más nutrientes y que no sustituyan los alimentos integrales y los buenos hábitos alimenticios por zumos”.
La fibra en la dieta
La fibra es un componente esencial en nuestra dieta diaria y a medida que la investigación avanza, se está revelando un nuevo nivel de importancia en torno a la fibra dietética, no solo por su relación con la salud intestinal, sino también por su papel en la prevención de enfermedades crónicas. Un estudio, publicado en la revista Nutrients, ha aportado nuevos hallazgos sobre cómo las distintas fuentes vegetales de fibra ofrecen beneficios adicionales que podrían cambiar la forma en que entendemos este nutriente.
Existen dos tipos principales de fibra: soluble e insoluble. Cada una de ellas actúa de manera distinta en nuestro cuerpo y proporciona ventajas específicas. La fibra soluble, por ejemplo, se disuelve en agua y forma una especie de gel que ayuda a reducir los niveles de glucosa en sangre y el colesterol. Alimentos como la avena, los guisantes o las manzanas son ricos en este tipo de fibra.
Por otro lado, la fibra insoluble no se disuelve en agua, lo que facilita el movimiento del material a lo largo del sistema digestivo. Este tipo de fibra resulta clave para quienes padecen de estreñimiento o problemas digestivos, ya que ayuda a aumentar el volumen de las heces. Alimentos como la harina integral, el salvado de trigo o las nueces son excelentes fuentes de fibra insoluble.
Un aspecto interesante que ha destacado el estudio es que cada fuente vegetal de fibra insoluble contiene componentes bioactivos únicos que están asociados con una reducción del riesgo de enfermedades cardiovasculares, diabetes tipo 2 y cáncer. “La gente comprende la necesidad de fibra y cómo se relaciona con la salud intestinal, un área del bienestar que se está volviendo cada vez más importante a medida que la investigación científica continúa revelando su impacto en la salud y el bienestar general”, señala Joanne Slavin, coautora del estudio y profesora en la Universidad de Minnesota.
Otro dato relevante que arroja esta investigación es la relación entre el consumo de fibra y el peso corporal. Los participantes que ingirieron una mayor cantidad de fibra mostraron menores índices de masa corporal (IMC) y una circunferencia de cintura más reducida. Incorporar alimentos ricos en fibra, como la coliflor o las judías verdes, podría ser una estrategia eficaz para quienes buscan mantener un peso saludable.